A la hora de definir debemos tener presente 3 objetivos: perder la máxima grasa posible, mantener la mayor parte de la musculatura y que no nos afecte al rendimiento en el entrenamiento.
Lo ideal es que sea un proceso lento, de entre 11 y 22 semanas para hacerlo bien, y perder un máximo de 700g semanales, para poder mantener la masa muscular que tanto esfuerzo nos ha costado conseguir y que además es motor metabólico, que nos ayudará a mantener alto el metabolismo basal.
Los hombres tienen un 3% de grasa esencial, mientras que las mujeres necesitamos un 10% mínimo para que nuestro sistema funcione sin fallos y sin poner en riesgo la salud.
En la definición óptima debemos de tener la dieta hipocalórica, acompañada de entrenamiento de fuerza más cardio, tanto Liss como Hiit. Pero siempre el entrenamiento de fuerza nos va a generar mayor pérdida de grasa que los ejercicios cardiovasculares, y nos ayudará a preservar e incluso incrementar la masa muscular.
El espejo y fotos va a ser nuestra mejor guía a la hora de ver resultados, ya que la báscula no nos dice nada a cerca de la composición corporal.
Las cosas bien hechas producen los mejores resultados!